Ohhh, es una pena muy grande decir que es la última semana. Pero todo acaba, ahora sólo me queda el recuerdo de una ciudad maravillosa y unos amigos estupendos que he conocido allí.
Estos días aprovechando que no tenía clases, salí a hacer fotos de la decoración navideña por mi barrio italiano de Little Italy.
Algún día que otro llovió, cosa muy extraña en el sur de California, pero que se le va a hacer, este año parece que el tiempo está un poco rebelde.
A pesar de que el tiempo no acompañaba mucho, no podíamos irnos sin comernos los últimos helados de nuestro sitio favorito: Yogurtland!!
Y para despedir la cocina, Vicky (una amiga de Granada) y yo intentamos hacer un flan como postre español, aunque no nos salió como nosotras queríamos... total que terminamos haciendo unas tortillas. De todas formas, pasamos una tarde muy divertida en la cocina de la residencia con más gente.
El último día para mí resultó ser el penúltimo, ya que me retrasaron el vuelo un día y me tuvieron que pagar una noche en un hotelito en la bahía to mono. Yo encantada porque además de que me regalaban un día más, tuve la oportunidad de visitar alguna cosa que se me había quedado en el tintero, como por ejemplo un hotelazo que se podía subir a la planta 40 y tenía unas vistas preciosas de San Diego.
Después de esta entrada no sé si tendré más cosas interesantes que contar en este Madrid tan aburrido y tan frío. Espero que os haya gustado saber de mí en algún momento y espero también que hayais disfrutado de algunas imágenes bonitas y momentos divertidos que he querido compartir con vosotros.
Besitos!!
Estos días aprovechando que no tenía clases, salí a hacer fotos de la decoración navideña por mi barrio italiano de Little Italy.
Algún día que otro llovió, cosa muy extraña en el sur de California, pero que se le va a hacer, este año parece que el tiempo está un poco rebelde.
A pesar de que el tiempo no acompañaba mucho, no podíamos irnos sin comernos los últimos helados de nuestro sitio favorito: Yogurtland!!
Y para despedir la cocina, Vicky (una amiga de Granada) y yo intentamos hacer un flan como postre español, aunque no nos salió como nosotras queríamos... total que terminamos haciendo unas tortillas. De todas formas, pasamos una tarde muy divertida en la cocina de la residencia con más gente.
El último día para mí resultó ser el penúltimo, ya que me retrasaron el vuelo un día y me tuvieron que pagar una noche en un hotelito en la bahía to mono. Yo encantada porque además de que me regalaban un día más, tuve la oportunidad de visitar alguna cosa que se me había quedado en el tintero, como por ejemplo un hotelazo que se podía subir a la planta 40 y tenía unas vistas preciosas de San Diego.
Después de esta entrada no sé si tendré más cosas interesantes que contar en este Madrid tan aburrido y tan frío. Espero que os haya gustado saber de mí en algún momento y espero también que hayais disfrutado de algunas imágenes bonitas y momentos divertidos que he querido compartir con vosotros.
Besitos!!
No hay comentarios:
Publicar un comentario